El amor a los otros no excluye el amor a sí mismo; lo cual no implica consagrarse únicamente a uno mismo en una actitud narcisista. La idea es que desde el autocuidado y la autoconsideración me habilito para dar a otros. Por otra , no se puede comparar el amor a sí mismo con el egoísmo.
Pedía perdón mil veces a su expareja suplicándole que volviera, que ella cambiaría, no dormía, no comía bien, su vida (creía) había terminado por su propia culpa, por no haber sabido manejar de una manera más madura la situación, por no haber conseguido que se quedara, mantenerlo a su lado!
Ahora bien: ¿De qué forma sabe si esos sentimientos están? ¿Cómo sabe si no han disminuido? Con lo que llamamos el termómetro del amor. Cada ademán, cada resolución, cada episodio, es medido por el termómetro para pesquisar si el sentimiento se sostiene, medra, o bien ha disminuido: ¿me ama? ¿verdaderamente me ama?
Imagina una película donde desde el principio hasta al final solo hubiera romanticismo. Todo son candelas, ramos de flores, sorpresas, sonrisas enamoradas. ¿Te agradaría la película? ¿O tal vez pensarías que es algo pastelosa?
Probablemente aceptará la invitación, no ha representado una amenaza y se ha mostrado abierto y franco con todos; a ella le agrada su compañía…así que las posibilidades de que acepte son altísimas.
Por si todavía no lo tienes claro, déjame decirte que el buen sexo no es sencillamente una apasionada noche de lascivia. No se limita solo al acto sexual. Va más allí y representa la unión más intima que se puede dar entre 2 personas que comn sus vidas a todos y cada uno de los niveles.
La mujer debe poner ahora aceite en sus dedos y, lentamente y en el sentido de las agujas de un reloj, aplicarlo a su primer chakra, ubicado en la línea de inicio del vello púbico, sobre el hueso púbico. Ese masaje de esa zona debe efectuarse a lo largo de 2 o bien tres minutos.
Esta verdad degradante y fundamental de desear los objetos cariñosos solo porque los demás desean nos puede llevar a estimar activar ese mecanismo al contrario en el resto a fin de que nos conviertan en objetos de deseo.
Las combinaciones precedentes pueden parecer un tanto extrañas para las personas de hoy. Ahora, hallará una lista de ciertos comestibles que son los estimulantes típicos que se emplean en nuestros días.
Proceso también inconsciente que de alguna manera me deja superar un poco la ambivalencia con premisas (ciertas y válidas o bien inciertas o no válidas) pues de otra forma se impediría la acción, cualquiera que sea, dirigida al amor.
