Sé creativa. Improvisa cualquier otro movimiento. Libérate de tus bloqueos y tabúes. No pienses lo que debes hacer, no proyectes nada, mantente en silencio, vacía, sintiendo cada ademán, observando sin juzgar. Recuerda que el masaje es asimismo una forma de meditación. ¡¡Entrégate con pasión!!
