Tócate de manera consciente durante unos diez minutos. Nota cómo vas reviviendo las diferentes unas partes de tu cuerpo. Masajea tus brazos, tu cara, los hombros, las manos, el pecho, el vientre… Imagina que tus manos son las de un experto terapeuta de masaje tántrico que alguien te ha regalado.
